Cómo lavar tu cabello correctamente

Pensaréis que lavarse el cabello no tiene ninguna ciencia, pero para mantener su integridad y salud hay que seguir unos pasos. Primero: busca tu CHAMPÚ ideal. Para ello, te tienes que fijar en tu cuero cabelludo. Si lo tienes normal (sin exceso de grasa, sin caspa, sin ninguna afección), utiliza un champú suave, sin sulfatos y sin parabenos. Si tienes alguna afección, el que la trate (grasa-para cabello graso; con caspa-anticaspa...). Segundo: DESENREDA tu cabello ANTES de mojarlo. Cuando el cabello se moja, se debilita, por lo tanto, si lo cepillas mojado, aumentas el riesgo de rotura. Es recomendable utilizar un cepillo de cerdas naturales o de púas anchas y separadas, que no acaben en "bolita". Tercero: HUMEDECE tu cabello con agua TIBIA. El agua caliente puede provocar sensibilidad e irritación. Cuarto: realiza DOS LAVADOS. El primero no es necesario que sea intenso. Utiliza un poco de champú y masajea ligeramente tu cuello cabelludo. Enjuaga. El segundo lavado realízalo con más calma e intensidad. Masajea el cuero cabelludo durante un par de minutos. Si tu champú es específico (anticaspa, para la dermatitis, etc), déjalo actuar durante unos minutos después de masajear. No lo olvides: ¡MASAJEA!, no frotes. Si frotas, lo que haces es levantar la piel e irritarla. Antes de enjuagar, distribuye la espuma por el resto del cabello con suavidad para limpiar los medios y puntas. Lo que interesa lavar es el cuero cabelludo, el resto no es necesario lavarlo con tanta intensidad. Enjuaga. Quinto: si lo crees necesario o lo deseas, aplica mascarilla y déjala actuar el tiempo recomendado por el fabricante (mínimo 5 minutos). Enjuaga en profundidad. Sexto: si ves que se te ha enredado mucho el cabello durante el lavado, aplica un desenredante y peina con un peine de púa ANCHA. Para finalizar, aplica un protector de calor antes de proceder al secado.